Jerarquías

Uno asiste estos días entre estupefacto y sorprendido, bueno no tanto, al debate entre fútbol o revolución. Recuerdo por los años de la transición, allá por los años setenta del siglo pasado que los puristas de la revolución veian muy mal eso de los porros o la cosa del follar, por ejemplo, porque distraían de la lucha. Este país tiende a los excesos, para lo bueno y lo malo. Así por ejemplo habrá gente que hoy mirará como subnormales a los que se pongan una camiseta roja. Es gente afortunada que tiene como evasión un "buen libro" o una pedorrada de pelicula francesa o alemana o incluso La Traviata o El lago de los Cisnes, que se yo. Porque en esto de la evasión tanbien hay clases y "clases" y no es lo mismo una cosa que la otra, es más algunas cosas deberían prohíbirlas directamente, como los toros en la comunidad autónoma de Catalonia, mismamente. Uno que es cortito, siempre ha pensado que "El futbol es lo más importante de las cosas menos importantes" como decía Arrigo Sacchi y no sin razón. Es más "Las mayores demostraciones de inteligencia las he visto en algunos lances del fútbol" decía el gran Rafael Azcona, escritor y guionista. Uno que no tiene complejos y está por mandar todo al carajo y apuntarse a lo que sea, a tiempo parcial eso si, porque la vida me ocupa a tiempo completo, ésta noche voy a disfrutar o a sufrir durante 90 o 120 minutos e incluso los penaltis. ¡Ah! y una obviedad! yo soy español, nos ha jodido, ¿que voy a ser? ¿de la Toscana? o de Nápoles dos Sicilias. ¡Anda ya!. ¡Claro que me gustaría que éste pais diera más premios Nobel y menos sinvergüenzas!, pero de momento es lo que hay.